Si está dirigida por Paul W. Anderson no hay que esperar nada profundo, sólo acción, la cámara moviendose y, en las últimas películas, algo de chicha. Está puede que sea su mejor película, o quizás su intento de hacer algo medianamente profundo, una serie B pura. Event Horizon es una nave de aspecto macabro que desapareció y es encontrada vacía, parece que se han cargado a todo el personal, los que van a averiguar lo sucedido se preguntan ¿qué les habrá sucedido a los tripulantes? Se va descubriendo que fueron al lugar donde nadie debe ir, se volvieron locos y empezaron a matarse entre ellos. Ahora la nave está maldita.
El protagonista es el peculiar Sam Neil, conocido para la mayoría por Parque Jurásico, y para unos pocos (entre los que estoy) por En la boca del miedo. Y es que el personaje que interpreta en esta película se parece mucho al del filme de John Carpenter: en los gestos, en algunas escenas, hasta algunas frases. Supongo que será casualidad, pero me ha llamado la atención.
Es una película muy entretenida, no me parece esa pequeña joya de la que hablan algunos, pero sí es meritoria.
Apunte: ¡Coño, que es 1997! ¡Cómo pasa el tiempo!
Apunte 2: Y En la boca del miedo de 1995. Mmmm...
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